CEZERYE HAVUÇ TATLISI: “Golosinas turcas de Zanahoria”

"Αυτό που δεν με σκοτώνει με κάνει πιο δυνατό"
"Beni öldürmeyen Beni güçlendiriyor"
"Lo que no me mata Me hace más fuerte"
Tot allò que no em mata Em fa més fort
Dijous 11 de Març del 2010
Jueves 11 de Marzo del 2010
Πέμπτη 11 Μαρτίου 2010
11 Mart 2010 Perşembe
Quinta-feira 11 de Março de 2010


___IMATGE DEL DIA___
" Sultanahmet Camii" (Il.lustració: Marc)
"Es difícil encontrar
en la sombra claridad,
cuando el sol que nos alumbra
descolora la verdad".

Victor Jara "Caminando, caminando"

_CEZERIYE HAVUÇ TATLISI_

Vamos hoy a preparar una “golosina” típica y muy, muy dulce de nuestra estimada Turquía. Conocemos las “halvas” más tradicionales (aunque todavía no las hemos preparado en en esta casa -todo se andará-) a las que todos los que estuvimos en calles de cualquier ciudad o pueblo turco hemos dedicado unos gloriosos minutos de degustación pero, también es cierto que la gastronomía turca es compleja, rica como la que más y en ocasiones refinada, detallista, tradicional y conservadora de ciertos valores que siguen vivos al paso de lustros y décadas. Detenerse en el basto e inabarcable mundo de su repostería, de sus dulces y postres varios es inaugurar un paraíso de tentaciones a cual más original y verdaderamente deliciosa. Desde los famosos Tulumba, Revani o Kadaifi (que sí hemos preparado ya en Bosphorus) hasta el magnífico Vaklava y pasando por las “curiosas” gominolas naturales llamadas “Lokum” pero que mundialmente reconocemos como “delicias turcas” el paisaje es cegador en su belleza, peligrosamente apetitosas para nuestra línea y el nivel de azucar en nuestra sangre... pero, con medida, una persona sana no debe renunciar a catar un poco de ese cielo, de esos sabores que conjugan lo oriental con lo occidental, lo extremado con lo suave, aromático, liviano...
De esta golosina que hoy vamos llevar a nuestras mesas cabe destacar su sabor excelente que, muy lejos de lo que uno pueda pensar a priori, queda lejos del que encontramos en esa zanahoria cruda que nos sirven en las ensaladas o de la que, cocida, acompaña a muchos de nuestros platos. Resalta de forma preponderante el suave aroma del limón así como el de la avellana (aunque cabe decir que los Cezeriye suelen prepararse también con otros frutos secos como el sempiterno pistacho turco o las nueces, también muy apreciadas en el país). Ese pequeño “tropezón" de las avellanas tostadas juegan un papel de conjunción realmente interesante al mezclarse con la textura blanda y un tanto gelatinosa de la zanahoria cocinada en almíbar. Es este un postre sencillo que, como todo lo simple, depende de la maestría y los pequeños secretos del cocinero para destacar y pasar de ser, más que bueno, excelente.

Aunque debemos destacar que contiene una elevada carga de calorías a causa del azúcar que lo compone, también es de justicia decir que gracias a su componente básico, la zanahoria, nos aportará una estimable cantidad de vitaminas A, B,B2, C,D,E y K, así como ciertos minerales como calcio, hierro, silicio, potasio, sodio, fósforo y magnesio.
No hay que olvidar que estamos hablando de una golosina, de un postre que debe tomarse con moderación, que es muy interesante por su buena conservación en el frigorífico y está muy bien para acompañar un té o una copita de algún licor a media tarde. Es también interesante por su coste pues los ingredientes para su elaboración son bastante asequibles y fáciles de encontrar en cualquier tienda o supermercado.
Fisgoneando por la red he visto que es un dulce también típico de la ciudad de Mersin, en las costa Mediterránea y cerca de la frontera con Siria. Quiro remarcar que habiéndolo probado en Istanbul, en el Misir Carsisi o Mercado Egipcio o de las Especias, donde es posible encontrar casi cualquier dulce de esta familia cuya variedad es infinita y del los cuales, en montañas o barras prestas a ser cortadas el láminas, se encuentran en todos los mercados y tiendas “dulces” de Turquía.
Sin más os animo a intentar esta pequeña delicia que yo presento en pequeños rectángulos pero que se pueden preparar en la forma que más os apetezca: en bolas pequeñas, barras rectangulares más largas, láminas mas delgadas o, si me apuras, formando figuritas como las que solemos hacer con nuestro mazapán (esta masa no es tan dúctil pero sí nos permite hacer figuritas sencillas). Seguid el proceso y perded el miedo a equivocaros porque solamente errando se aprende, solamente cayendo tenemos la oportunidad de volvernos alevantar.
___INGREDIENTES___
- 3 medidas de Zanahorias finamente ralladas.
- 1 y 1/2 medidas de Azucar.
-1 Limón.
- 1 medida de Avellanas (o pistachos, nueces, almendras...).
- Coco rallado.
-1 medida de Almidón de trigo.
- 2 cucharadas de Fécula de patatas.
- Agua.
...
___PREPARACIÓN___
1/ Rallamos finamente toda la zanahoria.
2/ En una olla grande ponemos toda la zanahoria rallada. Añadimos tres cucharadas soeras de agua y llevamos a ebullición con la olla bien tapada.
3/ Dejaremos cocer lentamente hasta que la zanahorie esté realmente blanda y se deshaga al contacto con un tenedor. Necesitamos una textura casi de puré.4/ Ya tenemos la zanahoria muy blanda y vamos a incorporar el azucar. Dejaremos cocinar lentamente hasta que se nos forme un almíbar denso y brillante.
5/ Ahora añadiremos el almidón de trigo y la fécula de patata al almíbar de zanahoria.
6/ A media cocción vamos a aderezar con la raladura de limón.

7/ Ahora es el momento de juntar a la masa las avellanas molidas (a mi me gusta que queden pedazos reconocibles per también se puede moler finamente los frutos secos para el Cezeriye). 8/ Separaremos la olla del fuego y aprovechando el calor residual iremos removiendo vigorosamente hasta conseguir que toda la mezcla se endurezca y adquiera una textura consistente.
9/ Esparciremos la preparación todavía templada en una fuente de cristal o acero inoxidable no demasiado alta.

10/ Naturalmente la masa no va a quedarnos uniforme y a causa de lo pegajoso de esta será difícil confeccionar esa placa lisa y homogenea que precisamos. Así, con la ayuda de un papel sulfurizado de cocina vamos a presionarla para que quede lisa y de igual grosor en toda su superficie.

11/ El resultado va a ser, más o menos, este:
12/ Introduciremos esta masa durante 8 horas en el refrigerador para que adquiera toda la consistencia que deseamos. Trascurrido este tiempo (una noche) vamos a dividir la placa en las porciones que queramos preparar. En este caso yo he cortado rectángulos que después partiré por la mitad.
13/ Extraemos, una por una, las piezas de Cezeriye y las pasaremos por coco rallado hasta que queden bien rebozadas.
14/ Propongo añadir una avellana (u otro fruto seco) sobre la golosina rebozada de coco. De esta manera enriquecemos la pieza y la hacemos más vistosa.
Y ya tenemos esto pequeños dulces, aromáticos, blanditos y bastante adictivos dispuestos para alegrarle la sobremesa a nuestros camaradas, familiares o invitados. Desde mi experiencia puedo asegurar que nadie le hace ascos a uno de estos Cezeriye de color vivo y textura agradable. Creo firmemente que acompañarlos con un buen té es la mejor opción pero tampoco sería una mala idea servirlos junto a una buena mistela (vino dulce) o incluso un anís o una buena Metaxa (brandy griego).
Y nada, que os deseo todo el éxito en esta nueva experiencia !!
¡ AFIYET OLSUN !
¡ BON PROFIT !
¡ شهيه طيبة !
¡ BUEN PROVECHO !
¡ Καλή όρεξη !

(Todas las ilustraciones de conejitos han sido relaizadas por Marc)

2 comentarios:

Νίκος-Εμμανουήλ dijo...

Merhaba ve kalispera, Enric!

Poco a poco vas haciendo de este espacio un maravilloso recetario de cocina internacional, mediterránea y, muy especialmente, turca.

Y no, no renuncio en absoluto a catar este delicioso cielo de cezeriye. De momento, la cata es visual, pero te aseguro que un día de estos me voy a poner manos a la obra y a preparar unas en casa. La elaboración no parece demasiado complicada y el resultado es espectacular. Esa presencia final que le has dado es digna de las vitrinas de las mejores pastelerías estambulíes.

Una vez más, me doy un garbeo por aquí y me marcho maravillado, no sólo por estas auténticas delicias turcas sino también por esos dibujos, esas ilustraciones magistralmente realizadas por Marc.

¡Felicidades a los dos!

Un abrazo y buen fin de semana.

N.E.

ENRIC dijo...

Kalispera kai merhaba Nikos !
Καλώς ορίσατε!

Me abrumas... siempre me abrumas...

Desde Bosphorus, lo sabes bien, pretendemos lanzar esa mirada soslayada hacia toda la vertiente mediterránea y, ¿será pasión también?) claro está, caemos por las “Turquías" frecuentemente. Pero desde mi sentimiento, cada vez más heterogéneo y poroso, puedo asegurar que ese mar que nos ata me conduce, navegante descarriado, cada vez más hacia el paraíso de los paladares, de las lenguas, de las tentaciones...

Cezariye, Karydopita, Pastiset de taronja, Tiramisu, Brioche o Kaab al Ghazal... ¿quién podría resistirse al dulce Mediterráneo?...

De esta cultura donde comer y prolongar "el hecho" hasta la ulterior taza conversando, discutiendo o cantando me siento hijo, hermano y padre, me siento cincelado a medida, adherido a su sí.

Amigo, las mejores vitrinas de las mejores pastelerías turcas son algo tan único que el simple hecho de imaginas uno de mis postres ahí me turba el alma. no pretendo tanto... mi intención es, bien lo sabes, aportar mientras aprendo de los demás. Es un toma y daca, un trueque, un estrechar las manos para conocernos. Y nada más.

Anímate a preparar estos Cezariye y te aseguro que no te vas a arrepentir. Son ricos y bastante asequibles. Cunden, huelen bien, tiene un aspecto agradable y, con medida, son bastante sanotes.

Lo que respecta a Marc, tal vez sea pasión (de nuevo) de padre pero coincido contigo, el tío es pura creatividad. A ver si las Nintendo y las Play Station no nos pierden....

Gracias, como siempre, por tu fidelidad de amigo, por tus palabras amistosas y tu positividad de compañero en las lides, siempre complejas, del agradar, del agradarme.

Çok teşekküler Nikos !!!!

Un fuerte abrazo camarada !

Τα λέμε.